La interpretación remota por vídeo es un servicio innovador que está cambiando la forma en que se comunican las personas. La IRV conecta a distintos grupos de personas entre sí sin la presencia física de un intérprete; el intérprete acreditado participa mediante un enlace de vídeo.


Crea un puente entre la interpretación telefónica y las soluciones de interpretación presencial, por lo que se reduce tanto el tiempo como los costes asociados a los desplazamientos y se añade la ventaja de contar con un soporte visual en los servicios de interpretación telefónica



Los servicios de interpretación por vídeo son ideales para comunicarse con el personal, los socios comerciales, pacientes o aquellos clientes con discapacidad auditiva o del habla, así como con los que tienen un conocimiento limitado del idioma de la conversación. La utilización de esta tecnología está cada vez más presente en la asistencia sanitaria, en el sector corporativo y en otras operaciones de negocios, ya que facilita la comunicación oral y visual.

El acceso bajo demanda y mediante un solo clic a intérpretes profesionales en su PC, tablet o smartphone reduce el riesgo de confusión gracias a que incluye el lenguaje corporal y las expresiones faciales.


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